martes

El Rincón Del Cinéfilo Caliente



Rebobine, por favor (Michel Gondry, 2008)

Hoy, para variar, voy a hablaros de una película que me ha gustado. No es que sea una obra maestra, pero me hizo salir del cine con una sonrisa de oreja a oreja. Y eso, en los tiempos que corren, no es baladí, máxime cuando se va al cine a ver la película y no a otros menesteres que aquí no competen. Dicho esto, debo advertiros de que el cartel de la película es de esos que invitan a salir corriendo. Tampoco los protagonistas, Jack Black y Mos Def, son de aquellos actores que justifiquen hacer cola en los Verdi rodeado de los Bohemian Fashions que pululan por el lugar. Pero si detrás de las cámaras está un tipo tan interesante como Michel Gondry, a la película hay que darle, por lo menos, el beneficio de la duda. Este hombre, además de perpetrar el anuncio más laureado de la historia (Drugstore, de Levi's, 1994), y de realizar auténticas joyas en formato de videoclip para gente como Björk, Beck y Daft Punk, es el creador, junto a Charlie Kaufman, de esa maravilla titulada Eternal Sunshine of the Spotless Mind, aquí titulada Olvídate de mi. La única película que me ha hecho olvidar, durante unos momentos, la aversión crónica que siento hacia ese engendro llamado Jim Carrey.

Rebobine, por favor, cuenta la historia de dos amigos que, por accidente, borran todas las películas en VHS del videoclub en el que uno de ellos trabaja. Por lo que, para evitar que el dueño se entere de la fechoría y el negocio se vaya al garete, deciden volver a grabar cada una de las películas que los clientes quieren alquilar. Esta sencilla trama le sirve a Gondry para hacer un repaso desenfadado de aquellas películas, que para bien a o para mal, forman parte de nuestra cultura popular. Desde Los Cazafantasmas a 2001: Odisea en el espacio, pasando por Paseando a Miss Daisy, Men in Black y Los Paraguas de Cherburgo. Pero lo que podría haber quedado en una sucesión de gags a mayor gloria de los cómicos protagonistas, deviene en un personal homenaje a la magia del cine. A esa capacidad que tienen las imágenes en pantalla grande para hacernos la vida más agradable cuando somos espectadores, y también a la oportunidad de expresión personal y creativa que ofrece el ponerse detrás de una cámara. También es un alegato entrañable y nostálgico por la dignidad de los formatos analógicos y los modos artesanales, tan denostados en la actual era digital. Y por último, es un canto al “cine de autor”, ese autor que todos llevamos dentro y que las nuevas tecnologías nos permiten exteriorizar, mal que les pese a aquellos que durante años han ostentado el poder de decidir qué podía filmarse y qué no.




Fuera de carta (Nacho García Velilla, 2008)
Por desgracia, no puedo hablar igual de bien de Fuera de carta. El debut cinematográfico de Nacho García Velilla, director de series como Aída y Siete vidas, esta plagado de personajes estereotipados, topicazos y lugares comunes. Para que os hagáis una idea: Javier Cámara interpreta a un chef con más puntos para obtener el premio a locaza del año que a la estrella Michelín; su mejor amiga, Lola Dueñas, es una mariliendri desesperada porque alguien se la folle y la quiera, a poder ser, por este orden; y el rabo por el que ambos suspiran es el de un ex futbolista, argentino, of course, al que da vida Benjamín Vicuña. Si os digo que también aparece Fernando Tejero, seguro que adivináis que interpreta al pinche de cocina quinqui pero de buen corazón, y que Chus Lampreave no podía ser si no la madre del prota, cegata y retrógada, pero eso sí, muy entrañable. Vamos, que en el cartel deberían poner un aviso: abstenerse los mayores de 10 años y menores de 60 que no se rían con el humor del estilo Escenas de matrimonio.




Otra muestra de to´l poderio
que tiene en coco metio
nuestra querida
Pussy Deluxe

6 comentarios:

Chicharrin dijo...

Pues más ganas me han entrado de ver la última de Gondry gracias a tu análisis que además compartes con muchos de mis compañeros de curro, ahora solo falta que alguien me acompañe...y ahí lo dejo pa quien lo lea.


También coincido contigo respecto al pobretico de Jim Carrey aunque tengo que puntualizar que en Man on the moon haciendo de Andy Kaufman no estuvo nada mal.

Anónimo dijo...

¿Se podría comparar con la Torre de Suso? Pese a que Javier Cámara lo hacía bien, me decepcionó bastante. Su final feliz me da arcadas.

Anónimo dijo...

Con mi anterior comentario, me refiero a Fuera de carta, no a Rebobine, por favor.
La de Gondry todavía la tengo pendiente, pero no se me escapa.
Hay que reconocer que el argumento es, de entrada,tan surrealista que ya resulta interesante ver cómo alguien lo convierte en una historia convincente.
Me encantan las pelis que me hacen creer lo increíble.

Pussy Deluxe dijo...

Ojo Zirie!, Si el final de La torre de Suso te produjo arcadas, el de Fuera de carta directamente te conducirá al vómito.

Chichi, también me cuentan que Carrey estaba bien en El show de Truman, pero es que yo no puedo con él. Es superior a mí. Sólo te digo que la única vez que he abandonado un cine a media película a sido por su culpa. ísico. Todavía no le he perdonado que sea el responsable.

Pussy Deluxe dijo...

Lo que me gustaría de verdad es que Gondry volviera a trabajar con el marciano genial Charlie Kaufman, ese sí que es capaz de crear argumentos surrealistas en los que no te importaría perderte.

Por cierto, los Chanantes hicieron una divertida parodia de un vídeo de Gondry para Bjork que podéis ver en Youtube.

Pussy Deluxe dijo...

Podeis ver el trailer de "Be Kind, Rewind" "suecado" por el propio Gondry aquí:

http://www.bekindmovie.com/youtube.html

La página es divertida y también aparecen los clips de las pelis "suecadas" por los protagonistas.