viernes

El Micrófono Caliente de Lord Velasco

Joe Crepúsculo

¿Por qué un escándalo?.

Resulta imperdonable que desde esta página todavía no hayamos dado el toque sobre Joe Crepúsculo, sin duda la cosa más sensacional que le ha pasado al pop español en los últimos años. La polémica, además, está servida: hay quien lo considera un timo. Y otros, que no lo consideran un timo, fruncen el ceño ante lo que califican un pop chatarrero, de arreglos toscos y producción ripiosa. Habría que mandarlos al cuerno.

Hay gente que solo sabe debutar con Ciudadano Kane, que solo es capaz de escribir un pentagrama si está a la altura de la Novena Sinfonía y que solo es capaz de escribir una novela teniendo a James Joyce en el punto de mira. Joe Crepúsculo, afortunadamente, no pertenece a ese tipo de gente. A diferencia de tanto ególatra sin futuro él es un auténtico creador, nos guste más o guste menos. Sus dos discos del año pasado, Escuela de Zebras y Supercrepus, constituyen la mejor tarjeta de presentación de su creatividad arrolladora: un total de 33 canciones, algunas de las cuales ya se han convertido en auténticos clásicos, grabadas en el comedor de su piso del Raval con la ayuda de varios amigos, teclados antiguos y chicharreras cajas de ritmos. El resultado es fascinante y, desde luego, nada ingenuo.


Junto a un sonido falsamente pobre, más bien exquisito, llama la atención lo desmañado de su voz y, muy especialmente, su talento para componer unas letras que algunos califican de surrealistas, bizarras y grotescas olvidando añadir intensas. Se trata de un vendaval de fuerza que, con justicia, barre con la gazmoñería y el aburrimiento de tanto pop formulario y que le ha llevado a consagrarse en el mismo año de su debut.


Con su música desprejuiciada, llena de sonidos juguetones que hacen pensar en cabarets, karaokes y organillos de las peores bodas, y con una voz arrastrada que muchos creen impostada, Crepúsculo firma dos grandes obras que, además, ponen el dedo en la llaga: no solo demuestran que el talento no se paga con dinero (como tantos otros antes que él se lo ha montado por su cuenta con apenas cuatro chavos) sino que, en pleno debate sobre la piratería y sobre la mutación de la industria musical, los ha colgado en su web de manera gratuita. Los interesados los pueden comprar poniéndose en contacto con la discográfica, la muy inquieta Producciones Doradas (http://www.produccionesdoradas.com/).


Y es que, en un mundo éste, tan lleno de viles y mediocres, la generosidad no es menos escandalosa que el talento.


Otro artistucho raruno

que canta como ninguno

presentado por Lord Velasco
(vista milana para encontrar la fama)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

A este tío no me lo creo. Va de friki para hacerse con la vacante de cantautor moderni raruno con cierta gracia para llegar a colarse en los 40 principales, pero en realidad se le ve a la legua que es un tio listo con ganas de llegar lejos más por su personaje que por su manida propuesta musical. Cosas como las que hace este tío se vienen hacien a mantas desde hace ya mucho tiempo. Y si el mérito es que haya grabado el disco en el lavabo de su casa, mañana mismo me llevo la grabadora al vater y hago música house con mis peos.

Anónimo dijo...

Si, hijo , si... y te comes dos limones y haces los pedos en estilo "acid" house.

Anónimo dijo...

Mira que sois brutos!

Pus a mi me mola el tío este. En concierto debe ser divertido. Lord, estate al loro y le vamos a ver cuando toque por estos lares. Le podemos proponer que acepte al Sádico indecente como telonero!!!

¡Hombre de las gafas, cómo me gusta el Love, etc. de los PSB!

Anónimo dijo...

Pues parece ser que el disco entero es la monda. Yo estoy deseando escucharlo...